miércoles, 11 de julio de 2007

( a la que por miedo no quiso amar )



Temblaba entre mis brazos,

padecía de angustia a la hora de la luna,

huía entre las hojas que bajaban de los árboles,

a media tarde, a medianoche, se volvía sombra.

En largos silencios impenetrables como piedras

se escondía y allí a sí mismo se negaba.

La sentí estremecerse bajo la presión de mis besos,

Recuerdo sus suspiros, su hambre, su hoguera,

Su perfume, su calor, sus húmedos besos,

y con su herida acuestas por la madrugada huyó desnuda,

recién amada, saló el rocío con su llanto,

la vi huir por la ancha noche y la estrecha aurora,

con miedo en su corazón de alondra, para siempre...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Quién huye del amor se queda sin el...

Muy bello tu poema, me gusta su musicalidad. Un placer leerte

Saludos

Gigi German dijo...

Asi es mi amigo, pero no lejano, la distancia aleja los cuerpos, no las almas...

Quien huye del amor se queda sin el, y priva de el a una segunda persona, a los seres humanos que tarde nos damos cuenta... Pero ya ves, esa es la vida,

Hermosas letras, como siempre.

Gigi

cieloazzul dijo...

Que triste!!
que manera de ponerle belleza a los infortunios...
hermoso W...
mil besos!

Anónimo dijo...

Temblaba la luna,

silencios impenetrables
se escondía bajo
mis besos

Recuerdo sus suspiros
herida la vi huir
para siempre...

.-.-.

Siempre existen tantos secretos bajo la palabra amor, tantos...